¿Bondad o manipulación? Cuando las orcas ofrecen comida a los humanos.

Un estudio publicado en la Revista de Psicología Comparada documentó decenas de casos de orcas que aparentemente donaban alimento a los humanos. Los expertos buscan una explicación para este comportamiento del cetáceo, considerado uno de los mayores depredadores marinos.
Las orcas son cetáceos muy inteligentes. Conocidas por su agresividad hacia otras especies, ¿podrían también ser amables? Un estudio publicado el 30 de junio en el Journal of Comparative Psychology , revista estadounidense especializada en el estudio del comportamiento de diversas especies, ha registrado 34 casos en los últimos veinte años en todo el mundo —incluyendo Noruega, Nueva Zelanda y California— en los que una orca trajo peces, aves, trozos de ballena, algas e incluso una tortuga a humanos.
“Tras traer estos suministros, casi siempre esperaban, probablemente para ver cómo reaccionaban los humanos a su gesto”, informa el periódico británico The Times . “Algunos valientes agarraban la comida el tiempo justo para echar un vistazo, antes de devolverla cortésmente al agua; las orcas la recuperaban y la traían de vuelta”.
Los investigadores están interesados en este fenómeno y se preguntan: ¿es pura bondad, un intento de manipulación o simple curiosidad?
The Times señala que este tipo de interacción entre humanos y animales es la base de varios mitos, empezando por el de Rómulo y Remo, amamantados por una loba antes de fundar la ciudad de Roma. Si bien el diario londinense enfatiza la importancia de la precaución al acercarse a las orcas, señala que ninguno de los 34 casos estudiados mostró agresión alguna por parte de los cetáceos. Además, esta es una de las primeras veces que se observa a un depredador compartiendo su alimento amistosamente de esta manera.
Según el sitio web científico LiveScience , “este comportamiento se puede explicar de varias maneras: juego, exploración, comportamiento cultural adquirido dentro de su grupo o incluso un intento de crear un vínculo con nosotros”. Sin embargo, el medio continúa, Si bien este comportamiento parece altruista, no se puede descartar la posibilidad de manipulación: el propósito de las orcas sigue siendo un misterio.
Jared Towers, el investigador canadiense que dirigió el estudio, agregó que es costumbre que las orcas compartan su comida entre sí, lo que les permite vincularse.
El fenómeno se observa independientemente de la edad o el sexo de la orca. Por lo tanto, podría ser motivo de curiosidad para estos inteligentes y comunicativos mamíferos marinos.
Courrier International