EE.UU. dejará de financiar parcialmente las vacunas de ARNm

El gobierno estadounidense libra una batalla contra el ARN mensajero, a pesar de las prometedoras investigaciones sobre diversas enfermedades. Esta tecnología cobró protagonismo durante la pandemia de COVID-19, que permitió la rápida comercialización de vacunas eficaces.
Lejos de los tiempos en que Donald Trump, en diciembre de 2020 –al final de su primer mandato en la Casa Blanca– elogió la eficacia y la velocidad de desarrollo de esta tecnología, que calificó de «milagro de los tiempos modernos», el secretario de Salud estadounidense, Robert Kennedy Jr., lideró un ataque a gran escala contra ella el martes 5 de agosto.
Conocido por su "escepticismo sobre las vacunas", anunció el cese de la financiación de proyectos relacionados con la investigación y el desarrollo de vacunas de ARNm apoyados por la Autoridad Estadounidense de Investigación y Desarrollo Biomédico (BARDA), la agencia gubernamental para la preparación ante emergencias de salud pública y amenazas de pandemia.
"Hemos analizado la ciencia, escuchado a los expertos y estamos tomando medidas", declaró Kennedy, añadiendo que "los datos demuestran que estas vacunas no son eficaces para proteger contra infecciones de las vías respiratorias superiores como la COVID-19 y la gripe". En un vídeo publicado en la red social X, incluso afirmó que "la tecnología de ARNm presenta más riesgos que beneficios para estos virus respiratorios".
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Le Monde