Mario + Rabbids: Kingdom Battle y las ideas locas que casi cambian todo

Cuando Nintendo y Ubisoft anunciaron Mario + Rabbids: Kingdom Battle, muchos lo consideraron una idea loca que de alguna manera funcionó. La combinación de personajes de Mario con los traviesos Rabbids parecía improbable, pero terminó siendo uno de los juegos de estrategia por turnos más exitosos de Nintendo Switch.

Lo sorprendente es que el resultado final casi no se parece a las ideas originales. Según Davide Soliani, director creativo, el equipo barajó más de una docena de conceptos radicalmente distintos antes de decidirse por la estrategia por turnos.

Entre las propuestas descartadas se incluían juegos musicales y hasta shooters en primera persona. Imagina a los Rabbids disparando entre hongos gigantes al estilo Call of Duty: divertido, extraño y totalmente inesperado. Estas ideas reflejaban la libertad creativa del equipo y cómo buscaban maneras de fusionar dos universos tan distintos sin perder la esencia de ninguno.

Finalmente, el equipo optó por el género que más les apasionaba: la estrategia por turnos. Esta elección permitió un balance perfecto entre diversión, desafío y la personalidad de los personajes.

Un reto importante fue incluir armas en el juego. Shigeru Miyamoto debía aprobarlas, y su criterio era claro: debían ser divertidas y coloridas. Esto llevó al equipo a crear múltiples bocetos y prototipos hasta encontrar un diseño que fuera creíble dentro del universo de Mario y que mantuviera la estética ligera y cómica que caracteriza a la franquicia.

El resultado fueron armas imaginativas y coloridas que encajaban a la perfección con los Rabbids y el mundo de Mario, potenciando la experiencia estratégica sin perder el humor característico.

Mario + Rabbids: Kingdom Battle no solo fue un éxito comercial, sino que también mostró cómo la innovación y la creatividad pueden surgir de ideas inesperadas. Aunque el juego final se centra en la estrategia, las ideas descartadas reflejan un proceso creativo audaz y lleno de imaginación.

Este éxito dio paso a expansiones y secuelas, como Kingdom Battle + Donkey Kong Adventure, demostrando que el equilibrio entre riesgo creativo y dirección estratégica puede generar resultados sorprendentes en la industria de los videojuegos.